miércoles, 31 de mayo de 2017

¿Es casualidad?

Se inicia con un trazo
para dibujar un momento
que es casi un cuento imaginario.
Cuenta a partir de una mirada
durante la primera velada:
música, fiesta, baile y risas
y un melancólico hasta luego
que en la siguiente casualidad se transforma.

Un café con leche y chocolate,
que comenzó con un paseo,
charlas profundas,
una cerveza y un final.
Horas de horas irrepetibles, eternas,
espontáneas, cálidas de noche fría.
¿Necesitas un abrigo?

¿Otra casualidad?
O tal vez solo un deseo
de que las cosas sucedan
a favor del próximo momento.
La velada que se sella
con un beso en la mañana.
¡A descansar!
el día apenas empieza.
¿Fue real? ¿O sigo soñando?
Creo que me estoy enamorando.

Hay mucho por recorrer
y muchos a quienes decir ¡hasta pronto!
Una colección por completar
de láminas con últimos momentos.
Y yo no quiero que la que te reste al final
tenga mucho que ver conmigo.

Pero de un café imaginario
al tono marrón de una caña
juegos de mesa
un nuevo corte
música en vivo, poesía
y sentimientos encontrados
se pasó a la última casualidad.

Ya no es una casualidad,
es un último intento
de invertir hasta el último minuto
antes de que marches
y llenes tu álbum de recuerdos.

Y yo, que me quedo con una leve
lesión cardiovascular,
esperando que la felicidad se te prolongue,
deseo que tarde o temprano
decidas que tu última lámina se convierta
en especial tu favorita,
porque para mi desde el comienzo
del cuento casi imaginario
ya era la única mágica.