martes, 17 de agosto de 2010

InfiMal (fragmento)

Entonces caminaba solitario por la calle, en busca de huevos para tibiarlos en el desayuno. Vehículos vacíos puestos de acuerdo para acumularse. En esa intersección inventaban un caos imperceptible, todos estábamos acostumbrados a eso. De molestarle, no, pero estaban tan vacíos como un tronco roído por termitas, casi deshabitado. 
No hay menor idea del porque se cruzó en su mente esa irremediable situación pero de algo estoy seguro; el día estaba frío y sus pasos estaban lentos, como no queriendo avanzar, estancándose en el inmediato pasado. 
No es fácil vivir solo recordando, inclusive los pasos que se dan en segundos se olvidan, y la mente, su mente, maquinal en sus acciones, le resta solo pasarse de revoluciones recordando, mas no viviendo el presente.
Pobre hombre, un ínfimo mal cercaba su vida. 
Ojalá él pudiese transportar la preocupación del pasado al presente. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario